Cinco segundos es el tiempo promedio que una persona decide si continuar o no navegando en un sitio web. Pero la velocidad no es suficiente. Debe ser receptivo, tener una buena arquitectura de la información, así como un diseño ligero y atractivo. ¡Lo mismo ocurre con su logotipo! Es su identidad visual y tiene que generar un impacto positivo, lo que hará de su empresa una autoridad en los servicios ofrecidos.